Acariciaba el zacate verde
Encandilando el potrero
Y corría ligero sobre los montes
Urgido por alumbrar el mundo
Me calentó temprano
El sol aquella mañana
Y por la tarde tramposo
Me dijo, vente con migo.
No, no es hora le dije,
Hay muchos trillos sin pasos
Que debo seguir trotando
Y hay muchos soles dorados
Que esperan amanecer
De noche la luna clara
Acompaño mis amores rotos
Escucho mis llantos a solas
Inspiro poemas por chorros
Me dijo de madrugada
¿Por qué no vienes con migo?
No, no es hora le dije
Me quedan mil noches claras
Y mil amores me esperan
Sueños, poemas y llantos
Y lunas que aun no han nacido.
Despierto, y de nuevo el sol
Radiante como ninguno,
Saludo cada jornada
Con sudores y sonrisas
Y por la tarde sereno
Me invita al último viaje
La luna llena de noche
Escucha mis pensamientos
Alumbra cada camino
A los balcones lejanos
Flores, sueños y cartas
Mensajes de amor prohibido
No, aún no salgo de viaje
A ese que no retorna
Tengo una piedra dorada
Guardadita en el bolsillo
La encontré cuando era niño
Caminando hacia la escuela
Pensando en soles y lunas
Y amores, y un largo viaje.
Solo un instante, un minuto
Solo eso a cambio pido.
En este viaje infinito
Que acaba y nace todos los días