miércoles, 7 de julio de 2010

Quiero llevarle

Quiero llevarle

Quiero llevarle una rosa roja, para que no se olvide que hay una sangre que se desborda de un corazón por ella.
Se la llevaré a su muro, y cuando amanezca la llevará a su cajita de sueños.
Quizás al mirar la rosa
Su sangre corra más fuerte
Corriendo como la mía
Que solo trata de amarte.

Quiero llevarle un verso, de colores y perfumes para que no se olvide de un amor romántico, sincero que nació por ella.
Se lo llevaré al aposento sagrado, donde duermen sus sueños mágicos.
Quizás a leer mi verso
En su aposento sagrado
Recuerde los sueños santos
En que su pecho me ha amado.

Quiero llevarle un dibujo, un retrato del mundo bonito que pinté en un futuro que espera por ella.
Se lo llevaré en un papelito, para adornar su templo al amor.
Quizás al mirar mis trazos
Recuerde el momento aquel
Que con mis torpes manos
Dibujaba suave su piel

Quero llevarle todo mi amor, y para eso debo rezar, correr, estudiar y entrenar cada latido; porque con ella, la conquista empieza siempre desde cero.
Se lo llevare en un abraso, y lo dejaré colgando de su belleza.

Talvez al sentir mi amor
Volar y tocar su puerta
Se rinda ante el vencedor
Y me entregue su alma abierta.


Enrique 2010,

Solo me queda

Solo me queda….resucitar.

Ya no debo correr,
mentir, ni viajar
ya no tengo caminos
ni trochas por donde andar.

Ya no me quedan montañas,
ni riscos, ni peñas altas
ni cuerdas largas
para volver a escalar

Ya no tengo lápiz
papel ni nada
no tengo poemas
para volver a escribir.

Ya no tengo fuerzas
ni ganas, ni fe,
ni una vaga idea
de donde te encontraré

Se me acabaron las flores
los versos y las canciones
se me ha extinguido la luz,
el sol, el agua y la luna.

Se me acabaron los pasos
que caminaba a tu cuarto
se terminaron las rizas
solo me queda el llanto.


Se le han caído las hojas
al árbol del paraíso
solo quedan mis sueños
esparcidos por el piso.









Mirando la luna llena
no encontré lo que buscaba
solo la imagen fugas
de una cara iluminada


Corrí de nuevo hasta el río
para encontrarme con tigo
y solo encontré roca seca
y tu cántaro vacío

Solo me queda morir
porque no haya nada que hacer
trato de levantarme
y no tengo amanecer

Solo me queda morir
solo me queda llorar
se me acabaron los sueños
y no tengo adonde ir

Morir no a de ser tormentoso
como este vil trago amargo
no ha de ser ni un poquito
de triste como tu olvido


Estoy soñando despierto
pues miro al ángel que invoco
luego miro un túnel negro,
¿Será que muero de a poco?

Ya no tengo más plegarias
Ni ganas de conquistar
Cenizas de mi alma quedan
Que debes resucitar.

Enrique 30/6/2010

Te esperaba desde siempre

Te esperaba desde siemrpe

A mi pequeño hijo que esta muy cerca de nacer.
Te esperaba desde aquel día, jugando entre las hojas del patio, y descubrí mi conciencia curiosa y preguntona.
Te esperaba contento, desde una tarde subido entre las ramas de un manzano, escuchando el sonido y el olor de sus hojas tiernas. Porque esa tarde descubrí el poder de una felicidad inocente, despreocupada y tenaz.
Te esperaba ansioso, desde aquella noche que mirando las estrellas me descubrí pequeño y solo. Y supe que mi eternidad, solo sería posible contigo.
Te esperaba desde un mañana, sentado en una piedra al lado de mi amigo río, y escuche tus pequeños secretos entre los pequeños chorritos de agua, que me contaron tu historia, la mía y de todo el universo.
Te esperaba desde la noche en que di mi primer beso, mi primer abraso, y mi primer amor. Porque allí escuche el pequeño eco de un susurro diciéndome que vale la pena vivir por él. Y tu mi pequeño sueño, inspiraste todo el camino de esos amores.
Ahora he sentido tus pequeños movimientos, como se mueve una flor, cuando desde la raíz es impulsada a nacer por el espirito de la tierra y sabe que florecerá y dará sentido a una existencia.
Ahora que he escuchado tu pequeño corazón, al ritmo del Big Bang, al ritmo de la música mas sublime y al ritmo del mío, cuando te pienso y te espero; me lleno de juventud, de esperanza, me lleno de toda esa eternidad que significas para mi. Me lleno de la energía del aire y de la frescura de una esperanza, una que esta por nacer, pero que siempre ha existido en mí.
Ahora me doy cuenta que ya no te espero, porque siempre has estado con migo desde la primera ves que, al igual que tu, respire mi primer bocanada de aire, y llore por primera ves, gritándole al mundo ¡nací, y nací para vivir intensamente! No te espero porque no solo eres mi hijo, sino mi maestro, mi padre, mi hermano y mi sol de la mañana. Eres mas que una parte de mi, eres una imagen que descubrí una mañana mirando una gota de rocío en el extremo de una hoja de café, eres el universo pequeñito.
Enrique junio 2010